Los cuatro Reyes

Los Reyes representan a hombres maduros. Pueden ser el padre o esposo de quien hace la consulta.

Rey de Bastos

Carta al derecho 

Es un hombre maduro, amante de la naturaleza. Es puro fuego, está lleno de energía, siempre activo. Muy apasionado en todo lo que hace, por eso resulta muy atractivo.

Ha prosperado en la vida por méritos propios. Tiene pareja estable y es un buen padre. Si tiene empleados, los tratará como a hijos.

Noble, leal, sincero y generoso. Se está a gusto a su lado, da confianza. Tiene madera de líder.

Carta invertida

Hombre maduro, muy primario, con una mente rústica y egoísta. Se aprovecha de las personas que están a su alrededor: familia, alumnos, empleados.

Es un padre severo, autoritario, intolerante. Cómo jefe es muy incómodo trabajar con él. Es inflexible con sus normas, siempre hay discusiones a su alrededor, puede llegar a ser agresivo. 

Es la sinrazón apasionada.

                   El Rey de Espadas

Carta al derecho

Hombre maduro con una mente privilegiada. Analiza problemas o situaciones difíciles y las resuelve correctamente. Su mano no tiembla a la hora de hacer algo que él considera justo y necesario.

Influye en la vida de los que le rodean porque su capacidad de analizar y organizar está por encima de lo normal, además es un buen profesional, está muy bien considerado, puede ser un buen juez, un excelente cirujano, un importante líder religioso ...

Cuando el Rey de espadas ordena algo, todos obedecen porque saben que tiene razón. Todos los problemas se resuelven ante él.

Carta invertida

Hombre maduro, muy inteligente pero sin sentimientos, no tiene compasión. Es frío de corazón y esta frialdad la lleva al límite.

Es un hombre fanático que se salta las normas sociales para aplicar su propia ley. Está corrupto y saborea su poder viendo el dolor y la injusticia en los demás.  A menudo actúa con violencia.

Es temido por quien le conozca.

Esta carta es una advertencia de peligro.

El Rey de Copas

Carta al derecho

Hombre maduro que domina el mundo de los sentimientos: es sensible, tolerante, compasivo romántico y fiel a su pareja.

Le gusta el mundo del arte, ir a conciertos, al teatro, a ver museos y espectáculos.

Es muy humanitario y generoso, le gusta ayudar a los demás. Ante cualquier conflicto, utiliza el diálogo y la diplomacia para alcanzar la paz, por ello tiene el respeto de todo el mundo.

Calma las aguas con mucha mano izquierda.

Carta invertida

Hombre maduro que no es lo que aparenta, es un hipócrita.

Domina el mundo de los sentimientos, los suyos y los ajenos, los provoca, los exagera para sacar un beneficio, cómo un falso predicador, un feriante que engaña a los que están de paso, un abogado que teatraliza para convencer al jurado, etc.

Puede ser un hombre respetable pero con una doble vida, alguien que tiene algo que ocultar, esconde una parte de su realidad.

No hay que fiarse de él cuando te proponga ayuda.

El Rey de Oros

Carta al derecho

Hombre maduro, con una mente bien dotada para las matemáticas y la física, por ello es muy terrenal, nada espiritual, ni romántico, ni apasionado. 

Es leal y fiel pero también egoísta, especialmente a la hora de conservar su dinero y sus posesiones. Su principal objetivo es su bienestar y el de su familia.

Está al día en asuntos económicos y se interesa por los grandes negocios. Ha llegado a la cima, a la riqueza, por méritos propios. Se ha ganado su posición a pulso, nadie le ha regalado nada. 

Su posición económica y social le hacen una persona muy influyente en la sociedad.

Carta invertida

Hombre maduro obsesionado con su dinero, sus propiedades y su posición social. No piensa en otra cosa.

Es un empresario sin escrúpulos y no le importan ni los riesgos, ni el peligro, ni la corrupción, ni caer en vicios o perversidades con tal de obtener beneficios. Todo vale con tal de permanecer en la cumbre.

El egoísmo y la avaricia son los rasgos más llamativos de su carácter.

Encontrarte con él es una experiencia desagradable.